Estrés Laboral: ¿Qué Ocurre en Mi Empresa y Qué Puedo Hacer Yo?”

-¿Qué es el estrés laboral?

-¿Cómo se mide?

-¿Qué son las condiciones psicosociales de trabajo?

- ¿Cuáles serían las medidas a tomar por parte de la organización? 

-Y yo, ¿qué puedo hacer para gestionar el estrés? 

El próximo miércoles 22 de Junio a las 18:00 horas en las instalaciones de la Fundación Universitaria, conoceremos las condiciones de trabajo que favorecen la aparición del estrés laboral (carga de trabajo, liderazgo, relaciones personales, tiempo de trabajo…) y aprenderemos diferentes claves para afrontar determinadas situaciones, así como técnicas de gestión del estrés aplicables al contexto laboral. 

Construiremos el taller entre todos los asistentes del #ProgramaInserta y utilizaremos como herramienta de apoyo a la comprensión de los contenidos un Estudio de las Condiciones de Trabajo de una Empresa Pública Canaria realizado en Diciembre de 2015. 

Según tu experiencia como psicóloga, ¿Consideras que en Canarias existen muchas personas con estrés? ¿Vivimos estresados?

Según mi experiencia, a pesar de que el clima y el carácter de los canarios nos ayuda a lidiar mejor con situaciones complicadas, veo muchas personas con sensaciones desagradables y que sufren por las situaciones que viven. 

Sentir o no sentir estrés dependerá de la evaluación, subjetiva, que le demos a un hecho. Debido a varios factores, como son: lo que hemos heredado, la situación económica actual y la falta de educación emocional, somos malos gestores del estrés. Más que estresados, diría que vivimos percibiendo nuestra realidad más negativa de lo que es. El centrarnos en lo negativo, en lugar de agradecer todo lo bonito que en el día a día nos ocurre, ¡que es mucho!, nos hace ser personas con las reacciones que en principio necesitaríamos para adaptarnos a un entorno que valoramos como hostil. Si cambiásemos nuestra forma de ver la vida, nos sentiríamos mejor física, mental, emocional y socialmente hablando. 

¿En qué debemos notar que nuestro nivel de estrés está al límite?

Los síntomas los podemos notar a todos los niveles, a nivel mental, fisiológico… Por ejemplo, el hecho de no poder dormir, comer de manera excesiva, perder el apetito, que nos lata el corazón más rápido de lo normal, olvidarnos de las cosas, o las reacciones en la piel suelen ser señales muy claras de que nuestro nivel de estrés es alto y negativo. Y cuando ni aun así cambiamos de hábitos o de pensamientos, podemos llegar a tener dificultades para respirar o sufrir una crisis de ansiedad. 

El cuerpo es muy sabio, el problema está en que vivimos desconectados de él y lo forzamos por las exigencias del entorno, de la sociedad, que adquirimos como propias. Entre más nos expongamos a situaciones de estrés, antes se activan los mecanismos de defensa y esto, a medio-largo plazo no es nada sano, ni adaptativo.

 Imparte: Leila Portillo, de Actio. Terapias I Psicosociología I Formación 

Ser Inserta tiene ventajas