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“África nos está abriendo las puertas y hay que aprovecharlo”

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42 jóvenes de Gran Canaria ponen rumbo a una nueva aventura al recibir una Beca África Occidental.

Marruecos, Gambia, Mauritania, Senegal y Cabo Verde acogen, desde este mes de febrero, a un grupo canario de diversos ámbitos profesionales que durante seis meses, y después de un exhaustivo proceso de selección, vivirán una práctica no laboral en el continente vecino. 

Con el gusanillo en la barriga, las maletas casi listas, y el corre corre de los últimos trámites. Así se encuentra en estos días previos a la partida el grupo de 42 jóvenes de Gran Canaria que disfrutará de una de las Becas África Occidental. Se trata de un programa que lanzó por primera vez en 2019 el Cabildo de Gran Canaria, el pasado mes de noviembre, a través de la Fundación Universitaria de Las Palmas.

“Aún nos quedan algunos días para ultimar el papeleo pero así lo dejo todo listo ya”, explica la arquitecta Laura Hechavarría Ortiz, de 28 años, en su camino de regreso a casa después de haber solicitado el certificado de penales. “¡Una cosa menos!”, exclama con la tranquilidad de saber que está todo en orden y el nerviosismo de enfrentarse en tan solo un par de semanas a una nueva ciudad, casa, empresa y amistades. La compañía TAF África Global, con presencia en ocho países del continente, la acogerá en Gambia durante un semestre en el que espera, asegura, “conocer de cerca la arquitectura africana y dejar un buen sabor de boca como una de las representantes de Gran Canaria”.

Otro de los recién titulados que llevará la marca Gran Canaria a uno de los países más occidentales de África es Daniel Cabrera Alvarado, de 21 años, con titulación de FP como Guía, Información y Asistencia Turística. Natural de Santa Brígida, se ha criado en una familia de campo “y decir en un entorno como el mío que me voy a África es bastante fuerte”, explica. “Mi madre llegó a decirme que si me iba no quería saber nada de mí”, recuerda entre risas, aunque añade que fue precisamente ella quien lo animó cuando, el día de Reyes por la noche, se enteró de que su destino sería Senegal. “Me entró miedo por no saber nada del país, ni de la ciudad de Dakar, pero ahora es precisamente eso lo que más ilusionado me tiene, el ir sin conocer prácticamente nada del lugar”, afirma. Y añade que se siente muy protegido gracias a que la Fundación Universitaria de Las Palmas ha gestionado el alojamiento, las vacunas y la relación con la empresa de acogida. Además, la Institución le brinda a cada persona una ayuda aproximada de 600 euros mensuales, gracias al apoyo del Cabildo Insular, y una formación intensiva en idiomas dependiendo del país asignado. “No hemos tenido que preocuparnos por nada, y eso es una tranquilidad”, asegura.

Administración y Dirección de Empresas, Ingeniería, Relaciones Internacionales, Magisterio, Económicas o Ciencias del mar, son algunas de las titulaciones de procedencia de quienes disfrutarán de la experiencia. Después de superar un riguroso proceso de selección de entre más de 150 candidaturas, aterrizarán en las ciudades Agadir, Nuakchot, Praia, Banjul, y Dakar para realizar estas prácticas no laborales remuneradas en administraciones públicas, empresas y entidades del tercer sector que operan en algunas regiones de África Occidental, un periodo en el que además cotizarán en la Seguridad Social.

La iniciativa busca estrechar lazos entre las Islas y el continente vecino a través de la juventud, y crear redes de apoyo en ambas direcciones. “No todo es pobreza en estas regiones, son países emergentes y, además, nos están abriendo las puertas y hay que aprovecharlo”, afirma Laura. Es por ello que considera que la oportunidad es recíproca. “No somos salvadores de África, ni mucho menos, podemos aprender mutuamente”, asegura. Algo que también opina Daniel, quien considera que “tenemos la idea de que África es la hermana pobre, solo vemos lo malo. Y yo creo que es un continente que nos puede aportar un montón de cosas”, afirma. “Siempre miramos con anhelo e ilusión a Europa o a Estados Unidos, ¿y qué pasa con África que son nuestros vecinos?”, se pregunta Laura.“Debería haber mucha más cooperación entre África y Europa, y el Archipiélago no puede dejar pasar la oportunidad de ser el puente entre ambas”, añade Daniel.

Así que con la mirada puesta en crear vínculos, a este grupo de 42 jóvenes ya solo le resta la despedida oficial prevista para la primera semana de febrero, los abrazos a sus familiares y amistades y subirse al avión para iniciar la aventura, que quizás no dure un semestre sino un poco más. “No descarto quedarme un tiempo una vez finalizado el periodo de la beca”, asegura Laura, quien tras haber realizado una Beca Erasmus en Polonia y una Beca Santander en Santiago de Chile, considera fundamental conocer otras formas de hacer las cosas. 

Así es también para Daniel, que aunque aún no sabe la función que desempeñará en Blue Horizont, el hotel en el que va a trabajar, tiene claro que se lleva las ganas de absorver otra cultura y otras miradas, que le aportarán un crecimiento no solo laboral sino, sobre todo, personal. “Creo que algo muy importante es que voy a conocerme más a mí mismo, quiero aprender de lo que veo y vivo e interiorizarlo”, explica con el conocimiento de lo que supone disfrutar de una experiencia de este tipo, tras haber realizado recientemente un voluntariado en Grecia, también de seis meses.

Ganas no les faltan, no solo a Laura y a Daniel, sino al grupo de 42 jóvenes que hoy son protagonistas de un programa que ha sido acogido con gran éxito por la comunidad universitaria. Porque, como dice Laura, “la vida no te va a tocar a la puerta, hay que salir a buscarla”.